domingo, 5 de mayo de 2019

The rubbish eaters

Si el teatro en sí mismo es una valiosa herramienta pedagógica, motivadora, multidisciplinar y transversal, con una dimensión no solo artística sino también comunicativa, llevarlo a cabo en una lengua extranjera fomenta además, de modo lúdico, las competencias lingüísticas en esa lengua. Así lo imaginaba nuestra compañera Margarita, especialista de inglés del centro, cuando comenzó a dar forma en su cabeza a una actividad de teatro para realizar en inglés con el alumnado de nuestro 6º bilingüe con objeto de llegar con su representación al mayor número de alumnado posible en la IV Semana Cultural del colegio sobre el reciclaje.



A partir del texto teatral "The rubbish eaters" de la revista "The teacher's magazine", comenzó un trabajo a nivel de aula que de forma colectiva abarcó vocabulario y pronunciación. Del mismo modo, se propició la reflexión sobre el hecho de superar los miedos para actuar en público ofreciendo estrategias para ello. Más tarde, el alumnado continuó un trabajo guiado en cuatro grupos, donde se repartieron roles (mediante reflexión consensuada de cómo cada uno puede aportar lo mejor al equipo) y se adaptó la obra según el caso para que todos los participantes del grupo tuvieran su papel, lo que implicó un trabajo gramatical y de vocabulario al tener el alumnado que cambiar verbos y pronombres del texto. Un par de alumnos que no quisieron actuar fueron speaker y ayudante de sonido. Una vez estuvieron los textos preparados, comenzaron los ensayos de la obra durante los recreos.



El vestuario para la representación fue confeccionado por la maestra. Destacamos que todo lo utilizado para hacerlo fue material reciclable o reutilizado, no comprando nada para su realización. El vestuario fue común para los cuatro grupos, ya que las representaciones se sucedieron en el tiempo y el atrezzo podía pasar de unos grupos a otros: El grupo que actuaba detrás ayudaba al anterior a vestirse o quitarse la ropa. Así, la actividad fomentaba aún más esa dimensión colaborativa y de trabajo en equipo que desde un principio fue seña de identidad.

El decorado se construyó reutilizando muchos objetos antiguos como cartelería, restos de belenes de pasadas Navidades... Al igual que para el vestuario, no se compró nada para el decorado, haciendo gala del valor de reducir residuos del que tanto hemos hablado en el centro durante estos días.


La valoración de esta actividad es sumamente positiva y enriquecedora a todos los niveles, no solo para quienes pudieron recibirla como espectadores, que adquirieron aún con mayor significado los contenidos trabajados estos días en el colegio, sino también para quienes la llevaron a cabo. De hecho, el grupo ha desarrollado muchísimo su conciencia de equipo y el compañerismo al ayudarse y colaborar para un objetivo común, manifestando siempre su deseo por estar en las representaciones de los otros compañeros y deseándoles lo mejor. Del mismo modo, ha supuesto una verdadera satisfacción y logro para el alumnado participante, destacando a aquellas personalidades más tímidas o inseguras que han desarrollado de forma espectacular sus competencias sociales y su autoconcepto.


Muy satisfechos con la realización de esta actividad, felicitamos a su promotora y artífice Margarita, así como a todo el alumnado participante que la ha hecho posible y al que la ha disfrutado como espectador. Para terminar, os dejamos con unos vídeos de las cuatro representaciones realizadas.